ULP : Una “universidad verde” que piensa a futuro

Por medio de iniciativas como Reciclados ULP, la gestión de residuos en origen y el biodigestor, entre otras, la ULP busca ser un partícipe activo del cuidado del medio ambiente en la provincia.

El calentamiento global y la urgencia por reducir las emisiones de dióxido de carbono desvelan a los líderes del mundo. En este contexto, la generación de energías alternativas y la optimización de los recursos parecen ser la clave. En busca de aportar un granito de arena a la política medioambiental que lleva adelante el Gobierno de San Luis y crear conciencia ecológica en la población, la Universidad de La Punta (ULP) busca convertirse en una “universidad verde”.

El punto de partida de muchas de sus iniciativas sustentables es la clasificación de residuos en origen, que se promueve en todos su predio y con la que contribuyen tanto alumnos, empleados como las empresas radicadas en el Parque Informático La Punta (PILP). Diariamente, se separan alrededor de 300 kilogramos de desechos que abastecen a las distintas propuestas medioambientales de la ULP.

Por ejemplo, los 50 kilogramos diarios de residuos orgánicos que se generan en el campus (cáscaras de frutas y verduras, restos de comida…) son destinados al biodigestor: un dispositivo que produce, por un lado, biofertilizante y, por el otro, gas metano. Según datos del programa Desarrollo Sustentable, actualmente se obtiene un metro cúbico de biogás por día, cantidad suficiente para mantener en funcionamiento un termotanque de 110 litros durante tres horas o cocinar 3 comidas para una familia de 4 personas.

La clasificación de desechos comprende también a aquellos definidos como RAEE (residuos de aparatos eléctricos y electrónicos). De esta manera, las computadoras, impresoras, mouses, celulares, teléfonos y otros artefactos fuera de uso, reciben una disposición adecuada a través de empresas habilitadas para ese fin.

Como si fuera poco, la ULP posee en su campus un aerogenerador de baja potencia, surgido de un proyecto colaborativo con escuelas técnicas de la Ciudad de San Luis. Actualmente, este dispositivo instalado a pocos metros del edificio de Rectorado, abastece de electricidad a la garita de colectivos y a la luminarias de la zona, que fueron reemplazadas en su totalidad por lámparas LED lo cual genera un ahorro de energía cercano al 80%.

Reciclados, una tonelada de razones para cuidar el medio ambiente

De igual modo, los papeles recolectados en el campus son llevados hasta la planta de Reciclados ULP. Allí se procesa cerca de 1 tonelada por año. Con esta materia prima se confeccionan hojas y cartones, que luego son utilizados para elaborar cuadernos, lámparas, agendas y otros artículos artesanales. No sólo los habitantes del campus contribuyen con esta tarea: ya hay varias empresas e instituciones de San Luis que aportan su papel en desuso a esta causa verde.

En su misión de divulgar el conocimiento científico, la ULP organiza visitas guiadas por su planta de Reciclados, donde alumnos, familias y turistas de todo el país conocen las distintas etapas del proceso. En lo que va del año, más de 2.125 personas ya participaron de esta propuesta. Además, se dictaron 279 talleres en distintas localidades de la provincia, con un público aproximado de 6.256 personas.

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