Misterio por la muerte de la nena de 10 años en un paraje cercano a Villa de la Quebrada

Rosalba Sosa, la nena de 10 años que murió en el paraje El Chañar, cerca de Villa de la Quebrada, se ahogó con su propio vómito, según explicó el forense Luis Lucero. El médico determinó que la causa de muerte fue asfixia por broncoaspiración, pero no pudo precisar qué mecanismo o enfermedad la provocó.

El médico explicó que encontró jugo gástrico en el estómago y en la vía respiratoria de Rosalba. “El vómito lo puede provocar cualquier mecanismo. Mi función es determinar la causa de muerte. Y en este caso, fue una broncoaspiración. Qué provocó el vómito, no lo sé”, se limitó a decir en un contacto con un medio de capital.

Rosalba era una nena con un desarrollo normal para su edad, delgada, pero sin signos de desnutrición. Tampoco presentaba signos de haber sido golpeada ni tampoco de alguna enfermedad.

¿Pudo el frío de una noche particularmente gélida y en pleno campo haber provocado el reflejo del vómito? Lucero no lo asegura.

El comisario Omar Talquenca, quien está a cargo de la subcomisaría de la Villa de la Quebrada, explicó que la nena vivía en una casa precaria, a la altura del kilómetro 96 de la ruta 146, “con techos de chapas y con las ventanas prácticamente sin cubrir. Cuando fuimos hacía un frío tremendo”, señaló.

“En la casa hay dos piezas. En una está la cocina y en la otra una cucheta. Esta nena dormía en el piso, en un colchón. La noche anterior le dijo al padre que le dolía la panza. No quiso comer ni tomar un té. Se fue directo a acostar”, dijo.

Juan Germán Sosa, el papá de Rosalba, quiso despertarla alrededor de las 8 pero su hija no reaccionaba. Alrededor de las 10:30, un vecino, Margarito Moreira, fue hasta el destacamento policial. “Hay una nena muy enferma”, dijo. Como el patrullero del pueblo no estaba disponible, fueron directamente en una ambulancia.

“La enfermera le tomó el pulso y estaba muy bajo. La llevaron al hospital de La Punta, pero lamentablemente murió en la ambulancia”, resumió Talquenca.

En el colchón -dijo- había rastros de vómito.

A Rosalba la velan en el salón de usos múltiples de la Municipalidad de la Villa de la Quebrada.

Lo que le pasó, al parecer, quedará cubierto de misterio.

Fuente:sanluis24